» Teología
The next time you hear about a terrible earthquake, there will surely be an aftermath -not only in the tectonic movements of the Earth- but also in the Jewish news. After every earthquake you will hear a homophobic rabbi say, “It is because of the Gays that this or that earthquake occured.” Why? Because it is written in the Talmud! I would like to use this anecdote as an exercise to explain what I call “cherry-picking in the sea of the Talmud” and to show how dangerous, harmful and foolish such declarations are.
El Talmud nos dice que desde el día que se destruyó el Templo de Jerusalén Dios quedó «confinado» a la halajá, y más precisamente a los cuatro codos de la halajá. ¿Qué significa esta frase? ¿La presencia divina se redujo en el mundo o se multiplicó? ¿Sólo podemos encontrar a Dios en el estudio y cumplimiento de la ley? En este breve artículo comparto mi lectura de esta expresión basado en los comentarios de Maimonides y Abraham Joshua Heschel entre otros. Analizo cada una de las secciones de esta particular frase, especialmente el significado de la típica expresión talmúdica de «Desde el día que se destruyó el Templo de Jerusalén» y la medida legal de «cuatro codos».
Los salmos nos dicen: «A Adonai he puesto siempre delante de mí – Shiviti Adonai LeNegdi Tamid». ¿Cómo interpretan los rabinos este versículo? ¿Cómo llevamos a la práctica este ideal bíblico?
Al concluir el Kadish decimos: «Ose Shalom Bimromav Hu Iaase Shalom Aleinu» (El que hace la paz en los cielos haga la paz entre nosotros). En este pequeño artículo analizamos el origen de está expresión, de que forma fue interpretada por la literatura rabínica y los exegetas medievales, como así también intentamos aportar alguna noción de como podemos, viendo el cielo, traer la paz a la tierra.
Es un lugar común afirmar que el Corán es un libro violento que incita a fanaticos y fundamentalistas a comenter atentados a lo largo y a lo ancho del mundo. Sin embargo ¿Qué ocurre con el Tanaj y con el Nuevo Testamento? ¿Están libres de pasajes y mensajes que llaman a la violencia? La respuesta, y algunas propuestas, las encontrarán en el presente artículo.
No hay mejor forma de obstaculizar el cambio que venerando al pasado. No hay mejor forma de anquilosar una tradición que idealizando el pasado. Desde la Edad Media un concepto fue ganando adeptos entre los intelecutales y legos dentro del pueblo judío: Yeridat HaDorot, lit. “El declive de las generaciones”. Especialmente en nuestros días en gran parte de la ortodoxia judía, pero fuera de ella también, este concepto es tomado casi como un dogma. Es mi intención en este breve articulo rastrear el origen de este concepto e intentar relativizarlo o contextuarlo presentando así también otras lecturas talmúdicas que se contraponen a está noción.